miércoles, 15 de julio de 2015

Teleoperadores

Quizás muchos de vosotros lo sepáis, pero como sigo escuchando y leyendo quejas sobre el asunto, compartiré con vosotros mi gozo. Hace unos días estaba trasteando con mi teléfono inalámbrico y en su menú de configuración vi una aplicación a la que antes no le había prestado atención... "Bloquear llamada".
Sois muchos los que os quejáis (algunos hasta hacen chistes y monólogos sobre el tema) de las llamadas repetidas e intespectivas de los operadores de telefonía y yo, hasta hace poco, era un afectado del bombardeo diario y contínuo (a las 13:00, a las 14:00, a las 15:00, a las 16:00...) del ataque despiadado de JAZZTEL.
Cogí el número de Jazztel que había quedado en la memoria del teléfono y lo bloqueé. En principio comprobé cómo en la siguiente llamada, ese número pasaba a no sonar en el teléfono (aunque veía en la pantalla que una llamada estaba entrando desde esa secuencia)... y sonreí feliz al ver que ganaba una batalla.
Pero mi gozo se vió truncado cuando al día siguiente entró otra llamada de Jazztel desde otro número distinto. En principio me frustró la idea de tener que bloquear un montón de números, cada vez que me llamaran desde ellos, sobre todo porque no sabía cual era el límite de números que se pueden bloquear... pero noté que todos tenían los mismos números iniciales, y busqué en mi terminal alguna solución, descubriendo una opción llamada "bloqueo de RANGO", y probé a meter esos números comunes de las llamadas de Jazztel (concretamente toda la secuencia, restando las dos últimas cifras).
Y ¡¡¡SORPRESA!!! no volvian a entrar llamadas desde esa centralita. Pero en el cuarto día de mi segunda batalla, volvió Jazztel al ataque. En este caso la llamada venía de una secuencia numérica distinta. Entonces recordé que hay muchas plataformas de llamadas para estos ataques inmisericordes. Volví a repetir la opción de bloquear el rango de esa segunda intentona. Se repitió por tercera vez, y volví a bloquear ese tercer rango.
Y desde entonces puedo volver a dormir la siesta sin que ninguna llamada (vendiéndome algo o queriéndome ofrecer información por algo que no he solicitado) me moleste.
Así que, si vuestro teléfono actual no tiene esta opción en su menú, os recomiendo encarecidamente que cambiéis de terminal, que se pueden dar por bien empleados los 20 euros que cueste el nuevo aparato si con ello conseguís evitar tanta insistencia cansina de los operadores.
NOTA: Las secuencias que yo he bloqueado son las que comienzan por 955 32 87 , 954 32 20 (plataformas de ventas desde Sevilla) y 983 07 03 (plataforma de venta desde otro sitio que no identifico).